A la hora de contratar un profesional para la prestación de un servicio con un dron, lo primero que hay que comprobar es que la persona física o jurídica elegida tenga toda su documentación al día. De este modo, si incurriese en infracciones o se produjese cualquier incidencia durante el vuelo y hubiese que depurar responsabilidades, el cliente gozaría de la máxima protección legal.
Otro aspecto que hay que tener en cuenta es que el operador de drones y el piloto pueden ser la misma persona. Sin embargo, ambas figuras han de estar perfectamente definidas y con toda la documentación en regla. De hecho, un piloto no podrá asumir encargos profesionales si previamente no ha sido habilitado y contratado por un operador.
Para confirmar que el trabajo se está confiando a un operador de drones autorizado, éste deberá aportar su registro en la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA). No obstante, tú también podrás hacer la comprobación pertinente, consultando si figura en su lista oficial de operadores.